jueves, 30 de junio de 2011

Mi bandera






Aquí está la bandera idolatrada,
la enseña que Belgrano nos legó,
cuando triste la Patria esclavizada
con valor sus vínculos rompió.

Aquí está la bandera esplendorosa
que al mundo con sus triunfos admiró,
cuando altiva en la lucha y victoriosa
la cima de los Andes escaló.

Aquí está la bandera que un día
en la batalla tremoló triunfal
y, llena de orgullo y bizarría,
a San Lorenzo se dirigió inmortal.

Aquí está, como el cielo refulgente,
ostentando sublime majestad,
después de haber cruzado el Continente,
exclamando a su paso: ¡Libertad!
¡Libertad! ¡Libertad!

3 comentarios:

  1. Celebro que hayas escrito el comentario porque me obliga a detenerme en este bello poema que es también la letra de una canción patriótica argentina, una canción que salía del fondo de la garganta, junto al pecho palpitante de amor por la nación, y se unia a otras voces, igualmente límpidas y de armoniosa potencia, para expresar cuánto amaba el niño argentino a su Patria. Una excelente creación poética que espero siga inspirando en los argentinos la mismas ganas de honrar a la patria, que generaba hace medio siglo atrás en otros pechos niños...

    ResponderEliminar

Aprecio mucho su comentario. Cordialmente, Mirta Delia.